miércoles, 21 de noviembre de 2012

Thanksgiving Day

Afuera el cielo está blanco, hay niebla y hace frío. Adentro, las llamas que enardecen la chimenea cubren con un manto cálido todo el salón.
La reunión gira en torno a una mesa perfectamente decorada: copas de cristal rebosantes de vino, canastos, hojas de otoño, velas, flores y frutas, madera, rojo, bordó, oro y una calabaza. 
En el centro un pavo brillante y exquisito atrae todas las miradas y la salsa de arándanos se escurre por los platos. 
La familia se reúne, charla, comparte, la tradición indica que se debe agradecer la buena cosecha, una oración, un momento. 
La escena tal cual nos lo contaron, como tantas veces hemos visto en películas o en la tan popular Friends, se acerca. Y hoy se celebra también afuera de EEUU y Canadá. Muchos se unen a esta fiesta y la importan a estas tierras como nuestros antepasados han hecho con muchas otras.
Para algunos resulta ser ridículo, para otros una diversión, otros tomaron la tradición como propia, y muchos sólo la observan desde un lugar lejano.
Lo importante es mantener la unión y celebración con o sin pavo, este jueves o el que sea, después de todo, la cena estará servida.

Thanksgiving Day


viernes, 2 de noviembre de 2012

Madrid celebra la moda




Hay quienes ignoran la fantasía de lo efímero, el sueño de lo distintivo y lo creativo de la moda. Hay quienes sólo logran ver la coraza sin distar siquiera entre la cuestión superficial y la que está cargada de arte, belleza e imperfecciones. En el marco de un país en crisis se brindan actualmente cinco grandes exhibiciones con la moda como hilo conductor.
En este post hablaré sobre la muestra que el sociólogo de moda Pedro Mansilla comisarió en el Palacio de Cibeles de Madrid, en pleno eje cardinal de la ciudad, en uno de los lugares más emblemáticos, donde turistas excitados, paseantes despistados y estudiosos de la temática en cuestión convivieron bajo un mismo techo para inspirarse con decenas de fotografías que repasaban lo mejor del diseño español.
La revisión de los diseñadores incluyó además un textual sobre lo que para cada uno de los creadores significaba la moda.
Y ahí estaba lo más interesante de todo: para algunos la moda era un juego, un trabajo lúdico donde poder expresar ideas oníricas, sueños infantiles y una obra entrañable.
Para otros, la moda era un vehículo de ideas que se entiende a través de la sensibilidad de cada uno. Las personas se vuelven intérpretes y la creación se materializa a través de la utilidad y no como algo meramente decorativo.
E incluso había un grupo de diseñadores que tomaban la moda como la expresión de un lenguaje universal.
Es interesante como una misma palabra dispara ideas tan dispares en personas que se dedican a lo mismo, o no; algunos se dedican a jugar, otros a crear obras de arte, otros a hacer catarsis personales, y algunos otros a buscar la funcionalidad de las prendas.
¿Cazadores de tendencias? Los nombres esenciales de la moda española (hasta el 3 de marzo en el espacio cultural del Palacio de Cibeles) es una excusa para pensar la moda desde un ángulo distinto y revalorizarla a través de su rica historia.

Digo que Madrid celebra la moda porque la cantidad/calidad de las muestras dedicadas a esta temática que hoy se presentan en esta ciudad son dignas de una celebración. Y un vistazo porque cada una de ellas sorprenderá hasta al más escéptico.